Dos años consecutivos hemos acabado con dos periodos sin lluvias gracias a la organización de una nocturna en btt. Sin embargo, este año no hemos suspendido la marcha y eso se ha debido a la valentía de un grupo de beteteros de Ricla, Salillas y Calatorao, que se han empeñado en salir, aún con la inminente tormenta que se avecinaba. Eran las once de la noche cuando los rayos y truenos que caían por la sierra hacían pensar que lo mejor era suspender la salida de nuevo, pero tras una mejoría en el tiempo nos atrevimos a salir en la total oscuridad. Solo en el valle la luna volvió a salir y como premio disfrutamos de ese juego de luces y brillos que cambiaron el paisaje que acostumbramos por completo. Tramos a oscuras se intercalaban con nieblas agarradas por las laderas que esperaron a descargar el agua cuando nosotros llegábamos al pueblo, allá a las dos y media de la mañana.
Desde el club, os damos las gracias a todos los que os atrevisteis a salir y en especial a esos riclanos que salen siempre y que les da igual el tiempo que se les ponga por delante.
Pd: Las fotos son tan penosas que no merece la pena ni subirlas...
Desde el club, os damos las gracias a todos los que os atrevisteis a salir y en especial a esos riclanos que salen siempre y que les da igual el tiempo que se les ponga por delante.
Pd: Las fotos son tan penosas que no merece la pena ni subirlas...
No saques al santo, haz una nocturna!